No me decepcionas nunca...
¡No me cambias por nadie, al contrario! ¡Me haces feliz!
Estás cuando te necesito y te marchas cuando haces tu trabajo.
No hace preguntas, solo actúas.
No importa la situación siempre me haces reír.
Hacemos lo que nunca tendríamos el valor para hacer.
Sacas de mí una persona que ni conozco, una persona que admiro...
Me haces sentir lo mejor, resaltas lo mejor de mí.
Me llevas a un lugar donde nada ni nadie me pueden afectar.
...Que sólo yo puedo estar y volar con mi mente y escapar de la realidad.
Vivir como quiero y ser como soy, sin persecución alguna.
Sin rencores. Sin compromisos y sin vergüenza alguna.
Solamente ser yo...
Contigo puedo alcanzarlo y tocarlo todo, me das las fuerzas para seguir...
Me das los motivos para volver a sonreír.
No me juzgas, ni me obligas.
Me permites SER lo que realmente quiero ser: libre y calmada.
Sin preocupaciones, sin dolores.
...Solo diferentes sensaciones; con extrañas reacciones.
Soñando despierta sin que interfieran.
Por eso es que te elijo una y otra vez.
Pienso en dejarte, olvidarte, pero es que ya estás en mí, eres parte de lo que soy...
Y no de quien fui cuando no te tenía porque si aun no te tuviera no hubiera logrado hacer nada de lo que he hecho en este poco tiempo que te conocí.
Me diste las alas que necesitaba para volar, para imaginar, para crecer sin miedo del mundo que está delante de mí.
Porque sin ti estuviera estancada en un solo sitio.
Pero te encontré y no te voy a dejar ir porque gracias a ti sé lo que es vivir.
Lo que es vivir de verdad, vivir fuera de los demás.
Vivir fuera de las opiniones de los que me tratan de engañar.
Tú me has demostrado algo diferente, tú me has hecho sentir completamente fuera de lo normal.
Por ti lo puedo discernir todo, lo real y lo falso.
Si no fuera por ti, quizás ya no estaría aquí.
Quizás seguiría siendo la misma niña que caminaba con los ojos cerrados y la llevaban de la mano.
Pero ahora puedo ver con el corazón abierto.
Viviendo en realidad, respirando la verdadera felicidad...
Cuando me siento perdida, al solamente oler tu aroma, saber que estas cerca, y saber que alguien más que yo te conoce, que me entiende, que me sigue por tu camino, me hace sentir contenta.
Otros dirán que es malo y que no es el camino correcto pero, ¿qué saben ellos?
Ellos no conocen este mundo como nosotros.
Ellos no nos entenderían por más que quisieran...
Nadie lo entiende como tu...y nosotros.
Por eso te seguimos, te buscamos donde sea que te encuentres, te compartimos en ocasiones...
Y contamos nuestras historias, los momentos que hemos pasado contigo.
Historias buenas, historias que no se olvidan jamás, historias que marcan nuestras vidas;
Con la mayor felicidad porque eso lo que eso nos brindas cuando estas.
Sabes cómo borrar las caras de tristeza no importando quien sea...
Pregúntame cómo lo haces... Porque aun no sé cómo lo consigues.
Simplemente somos nosotros mismos que obtenemos nuestras verdaderas personalidades,
Pero tú nos das la valentía para seguir.
La Valentía para ser Feliz, para poder reír con todas nuestras fuerzas.
Para soñar, para ser libres y alegres sin importar quién o qué nos produjo tristeza.
Esos pocos minutos en que apareces, esos minutos que se convierten en las horas más preciadas porque sin esos momentos, ¿quiénes seríamos...?
